Finalmente Google anunció que no va a participar en el acuerdo publicitario con Yahoo! que, por un lado iba a salvarlos de caer en las garras de Microsoft y que, por otro lado, iba a terminar creando un cuasi-monopolio de publicidad en buscadores o SEM.
Ni los medios de comunicación (soportes), ni los anunciantes (que al fin del día son los que ponen el combustible de la industria) querían que la alianza se concrete... y el gobierno iba a investigarlos por monopolio algo que, por más que la definición de "EVIL" sea cada día más flexible, no es Google-Friendly.
Las acciones de Y! subieron casi un 5% y ahora valen, apenas, el 40% de lo que Microsoft ofreció en su momento; con lo que seguir sosteniendo a Jerry Yang en el directorio va a ser muy dificil y Carl Icahn debe estar pensando en como recuperar algo de su inversión especulativa.