General Motors compra los restos de Sidecar

  
Apenas 15 días después de anunciar que Sidecar había triunfado al cerrar sus puertas aparece GM y compra sus restos y tecnología para su iniciativa Maven… luego de invertir $500 millones en Lyft y así adelantarse a Ford que es el otro fabricante tratando de entrar en el mercado de servicios.

Dos detalles interesantísimos a analizar, la disrupción de un mercado donde caen hasta las licencias de manejo por modelos totalmente diferentes a los tradicionales (doh disruptive :p) y por otro lado el peso específico de Uber que es el único visto como competencia por todo el mercado de trasporte. (+ info)

El cierre de Sidecar y la realidad distorsionada

  
Hoy Sidecar decidió cerrar sus puertas, apenas 3 meses después de levantar una ronda de u$s 15 millones, y su fundador describe el cierre como una victoria… amarga.

Para los que no lo conocen, Sidecar dice que tuvo que cerrar por “desventajas de capital” porque Lyft levantó u$s 1bn y Uber u$s 12bn… Pero que ellos inventaron el concepto de ridesharing y lanzan los productos que otros copian.

Cuando leo estas notas (y, en serio, no pongo en duda que hayan sido innovadores o no) me pregunto si los emprendedores no están llevando el concepto de “aprender de fracaso” un poco más allá de lo que se debe.

La empresa, Sidecar, cerró porque su producto perdió y todos sus competidores los sobre pasaron, el resto es una ilusión óptica que encima quemó u$s 15 millones de inversores en menos de tres meses y eso no es un “bittersweet victory”