Para los que no lo sepan, en España ya pasaron por esta discusión del Cánon Digital y terminaron, pese al esfuerzo de todos y a la creacion de una plataforma digital, con el proyecto aprobado y con un Cánon que, encima, es el más caro de todos.
Así que, aprovechando la oportunidad se me ocurrió hacerle dos preguntas simples a tres bloggers representativos de España. Personas a las que respeto por su capacidad de entender el mundo digital y que, de una manera u otra, entienden y explican claramente los derechos que, las organizacionaciones de propiedad intelectual terminan violando los derechos de los ciudadanos.
Las preguntas
Mis preguntas son simples y buscan aprender de su experiencia y ver, si en mi paranoia, creo que las discográficas están tomando como modelo a España para cambiar otras cosas.
1. En un país donde no existe siquiera el concepto de copia privada ¿es coherente el canon o están tratando de introducirnos un concepto que acá no existe para luego imponerlo? (para entender la principal diferencia entre un "debate" y otro; y ver si hay relación con la agenda global de las agencias)
2. ¿que errores pensás que se cometieron en la lucha contra el canon desde la blogosfera española para que termine siendo aprobado (aclaración: no porque estén ahí los culpables sino para aprender y no cometerlos nuevamente)
Abre Dans
Enrique Dans, es profesor del IE y uno de los que tienen la lengua más filosa para explicar el proceso de cambio en el mundo digital, donde no sólo hay cambio de modelos de negocio sino de estructuras sociales; y es el primero en responder las preguntas
1. En un país donde no existe siquiera el concepto de copia privada ¿es coherente el canon o están tratando de introducirnos un concepto que acá no existe para luego imponerlo?
El concepto de canon compensatorio nunca puede ser coherente, porque parte de un extremo falso: que es preciso compensar a alguien por el desarrollo del progreso tecnológico. Internet supone un conjunto de ventajas tan grandes para los artistas, que la sola idea de pensar en la obligación de compensarlos por su existencia es una falacia total.
El canon impide que los artistas se vean forzados a desarrollar nuevos modelos de negocio mucho más basados en la cercanía a sus clientes y fans, y privilegia el mantenimiento de un sistema de intermediarios basado en estructuras del siglo pasado, de intermediarios que hoy en día resultan completamente innecesarios: por ejemplo, el canon se calcula sobre el numero de discos vendidos, cuándo resulta evidente que este dato resulta hoy en día completamente irrelevante y carece de relación con la realidad.
Los músicos deben aprender a vivir en el nuevo entorno que Internet define, aprender a desarrollarse en la nueva economía de la atención, y generar recursos basándose en su trabajo, no en subsidios absurdos.
2. ¿que errores pensás que se cometieron en la lucha contra el canon desde la blogosfera española para que termine siendo aprobado
Los errores se centraron en adoptar una actitud tibia en algunos aspectos, presas de una especie de "complejo de culpabilidad" creado por el entorno: descargar música no es ilegal, ni algo malo o negativo en modo alguno. Ningún político puede arrogarse el derecho a decir que los usuarios de Internet somos "piratas", porque eso es insultar gravemente a la ciudadanía y a su inteligencia.
Aquí no hay piratas, hay gente aprovechando la tecnología para disfrutar de una serie de obras sin ánimo de lucro, y haciéndole al artista el favor de entregarle una parte de su atención. Las obras se crean para su disfrute, y que una persona las baje de Internet es algo perfectamente lógico, natural y que no puede ser evitado en modo alguno, no importa cuantas barreras se pongan.
Los políticos parten de consideraciones arcaicas que afirman que "descargar es robar", que resultan una auténtica barbaridad: descargar es hacer una copia, dejando el original completamente intacto, y favoreciendo que puedas apoyar al artista cuando éste da un concierto o utiliza su obra en otro contexto.
Resulta fundamental exhibir una actitud fuerte y clara desde el primer momento en este sentido: un político que repite como un papagayo las consignas de la industria musical es o bien un corrupto, o bien un ignorante, con total seguridad, y debe en cualquiera de los dos casos ser apartado de la función pública. La firmeza en ese tema es fundamental, porque se trata de los derechos del pueblo contra los privilegios absurdos de unos pocos.